La tiradora surcoreana Kim Ye-Ji: de la precisión olímpica al universo de la moda y el cine

La deportista, que deslumbró en París 2024 conquistó, ahora conquistó el mundo de la moda como imagen de Balenciaga y se perfila como una prometedora estrella del entretenimiento

La tiradora surcoreana Kim Ye-Ji emergió como una de las figuras más importantes del momento. Desde su destacada participación en los últimos Juegos Olímpicos hasta su rol como imagen de la prestigiosa firma Balenciaga, su evolución cautivó tanto al público como a la industria de la moda. Su carisma y elegancia natural son las virtudes que destaca la revista Paris Match.

El nombre de Kim Ye-Ji se popularizó durante los Juegos Olímpicos de París 2024, donde su actuación en tiro deportivo se convirtió en uno de los momentos más comentados del evento. Aunque finalizó con la medalla de plata, su actitud serena y segura la colocó en el centro de atención.

Durante la competencia, mostró una compostura inquebrantable que rápidamente se viralizó en redes sociales, destacándose tanto por su destreza como por su imagen poderosa.

En una de sus presentaciones más recordadas, en una competición previa en Bakú, Azerbaiyán, estableció un récord mundial mientras sostenía el peluche de su hija y usaba unas gafas futuristas. La despreocupación con la que logró la hazaña fue ampliamente comentada por expertos y fanáticos, consolidándola como una figura icónica dentro y fuera del ámbito deportivo.

El peluche de su hija, siempre presente en sus competencias, se ha convertido en un símbolo de fuerza y conexión personal para Kim Ye-Ji. (REUTERS/Amr Alfiky)

El salto de Kim Ye-Ji a la moda fue inevitable. Balenciaga, siempre en busca de figuras que encarnen autenticidad y magnetismo, la seleccionó como rostro principal de su última campaña publicitaria junto a Roméo Beckham. El fotógrafo Juergen Teller capturó a la atleta en entornos urbanos de París, utilizando muebles vintage como elementos escénicos y un estilismo diseñado por Demna, director creativo de la firma.

En una de las tomas más impactantes, Kim aparece vestida con un vestido negro y un bolso a juego, apoyada con actitud segura en una silla. En otra imagen, luce una chaqueta de jean combinada con un pantalón corto mientras posa en un sofá rojo, proyectando confianza y fuerza. Según los creadores de la campaña, la elección de Kim se basó en su capacidad para transmitir una imagen poderosa sin esfuerzo, cualidad que pocos poseen en la industria.

Anteriormente, Kim había trabajado con Louis Vuitton, aunque su colaboración con Balenciaga marcó un punto de inflexión en su carrera en la moda, consolidándola como una figura de referencia en el universo del lujo y la alta costura.

Desde el campo de tiro hasta las calles de París, Kim Ye-Ji se adapta con maestría al mundo de Balenciaga, una marca que, al igual que ella, redefine las reglas del poder visual y el estilo. (Balenciaga / Juergen Teller)

El impacto de Kim no se limita a la moda. Su imponente presencia la llevó a participar en la serie de televisión Crush, donde interpretó a una asesina con notable éxito. Esta incursión en el mundo del entretenimiento desató especulaciones sobre futuros proyectos cinematográficos.

La combinación de su habilidad para el deporte, su estilo único y su capacidad actoral alimentaron aún más los rumores sobre ofertas en el cine y la televisión. Su versatilidad y fuerza escénica la colocan como una candidata natural para proyectos de gran alcance.

Su interpretación en Crush revela una nueva faceta de Kim Ye-Ji, quien, más allá de su dominio en el deporte, se muestra como una actriz con una presencia única, lista para conquistar nuevos horizontes. (ASIA LAB)

Kim Ye-Ji se convirtió en una de las figuras más influyentes del último tiempo, trascendiendo las barreras del deporte y la moda. La elección de Balenciaga para que se convierta en su imagen, subraya la tendencia de las grandes casas de moda de buscar rostros frescos y auténticos que resuenen con el público global.

Su capacidad para trascender el ámbito deportivo y dejar una marca en la moda es un testimonio de su talento multifacético y su capacidad para conectar con diversas audiencias.

Su historia es un testimonio del impacto que la autenticidad y la fuerza personal pueden tener en el mundo moderno. Desde los Juegos Olímpicos hasta las pasarelas y posibles incursiones en el cine, Kim sigue redefiniendo lo que significa ser un ícono global en la actualidad.