La madre del reo decapitado en Chile demandará al Estado y dijo que el asesino “no está loco y tenía todo planeado”

Acusó que el compañero de celda de Vincent González había avisado que lo mataría

La familia del preso decapitado por su compañero de celda en el Complejo Penitenciario Biobío de Concepción (500 kms al sur de Santiago), anunció que demandará al Estado por no haber garantizado la seguridad de la víctima al interior del recinto penal. Su madre, además, aseguró que el asesino “no está loco y tenía todo planeado”.

El macabro hallazgo se produjo este lunes, poco después de las 09:00 horas, cuando dos gendarmes que abrieron la celda 21 del módulo 42 del recinto penal para desencerrar a sus dos moradores se encontraron con una escena espeluznante: una cabeza cercenada los observaba fijamente, sobre el velador, con una biblia al lado. En la litera, el cuerpo decapitado de Vincent González Aguirre (27 años) y en las paredes, escrito con sangre, varios pentagramas y el 666, el número del diablo.

El autor del crimen que conmocionó al país fue identificado como Diego Valdés San Martín (41 años), quien según informaron desde Gendarmería habría actuado “aparentemente motivado por una situación de enajenación mental, de la cual no había antecedentes”.

“En el lugar se encontró una biblia y escritos con símbolos satánicos, a lo que se suma lo manifestado por el presunto agresor respecto de que los hechos ocurrieron en un contexto de un ritual”, señalaron.

El agresor, conocido como el “Indio Loaiza”, cumple una condena de 16 años por homicidio y porte de arma de fuego en la ciudad de Arica (2.000 kms al norte de Santiago), de donde es oriundo, al igual que lo era su víctima. Y tras el hecho, varias voces en la oposición pusieron en entredicho las palabras del ministro de Justicia, Jaime Gajardo (PC), quien un día antes del crimen aseguró en entrevista con El Mercurio que Gendarmería “mantiene el control de los penales del país”.

“Esto es un hecho grave y bastante inédito en el sistema penitenciario chileno, que se da en una cárcel que no tiene sobrepoblación. Por esto, las medidas hay que reforzarlas para que esto no vuelva a ocurrir en ningún otro penal de nuestro país” dijo taxativo.

Este miércoles, en entrevista con Radio Bío Bío, la madre de la víctima sostuvo que el autor del horrendo crimen actuó con premeditación y alevosía y fustigó a Gendarmería por no haber hecho nada al respecto.

“Yo voy a demandar al Estado, a Gendarmería y al tipo que me quitó a mi hijo. Es imposible que no hayan escuchado nada. No hubo resguardo, se supone que él estaba en una (cárcel) de Alta Seguridad, ¿dónde está la Alta Seguridad?”, sostuvo.

Y a renglón seguido aseguró que Diego Valdés San Martín “no está loco. Él tenía todo esto planeado, días antes dijo que iba a matar a alguien”.

Según la mujer, el fallecido había sido trasladado desde la cárcel de Arica debido a problemas de hacinamiento y se caracterizaba por su buena conducta, trabajando al interior del penal como soldador y gásfiter. Durante meses, la familia visitó tribunales y elevó infructuosas solicitudes para que fuera enviado de vuelta a su ciudad natal. De hecho, este miércoles la víctima tenía programada una audiencia al respecto.

Finalmente, acusó descontrol por parte de Gendarmería y dijo que tres reos han sido asesinados en los últimos meses solo en el módulo 42.

Este fue el macabro escenario que encontraron los gendarmes al abrir la celda.

En paralelo, este miércoles el Servicio Médico Legal (SML) entregó los resultados de la autopsia practicada al occiso. Según Jaime Téllez, director regional del servicio, Vincent González falleció producto de un “traumatismo torácico complicado”, antes de que el “Indio Loaiza” le cercenara la cabeza.

Finalmente, Diego Valdés San Martín fue trasladado también este miércoles, bajo estrictas medidas de seguridad, hasta el Recinto Especial Penitenciario de Alta Seguridad (Repas) en Santiago.